lunes, 25 de mayo de 2009

Mis Comienzos....(I)

Recuerdo aquella mañana de domingo cuando mi padre solía venir a verme. Era una de tantas otras cuando el tiempo entre jugar a baloncesto y estudiar me daba para volver a mi casa y reencontrarme con mi gente.

En muchas de esas mañanas mi padre y yo solíamos ir a visitar a mi tío, gran entrenador de fútbol y famoso en toda la provincia, para así poder charlar de deporte y de lo que más nos gustaba que era como tratan los medios la información deportiva y todos los intríngulis que ello conlleva.


Uno que estaba en primer año de carrera comenzaba a escuchar de qué iba todo aquello, siguiendo que algún día me dedicaría a ello plenamente. Ese mismo día mi tío me pidió que le mandase un currículum vitae mío, cosa a la que accedí sin saber para lo que era.


Llegaba el verano, y poco antes de acabar los exámenes de aquél año 2005 recibí una llamada un tanto sorprendente.


- ¡Hola!, ¿Álvaro Quirós?
- Si, soy yo.
- Me llamo A.C. y te llamo de La Voz de Cádiz, era para saber si te gustaría trabajar con nosotros este verano…..


Tras escuchar esas palabras….uno con 18 años apenas consigue reaccionar a lo que se le venía encima, más y cuando mis compis de carrera estaban pensando en el verano que se iban a pegar en la playa.


Por aquél entonces, antes de comenzar ese verano en La Voz de Cádiz, ya había conocido al que es hoy mi actual jefe, Miguel Gallardo, Director de Comunicación de la FEB, en unas jornadas sobre Deporte y Comunicación que realizó un gran amigo y profesor como es Joaquín Montín.


Y llegó el día, 3 de Julio del año 2005. Nunca se me olvidará aquél día. Edificio Glorieta en Cádiz, en uno de esos típicos días soleados donde el saber que tienes la playa a 200 metros es más un suplicio que una alegría. Al entrar por el Hall de la redacción y tras hacerme esperar unos 5 minutos llega el momento….


- ¡Hola Álvaro!, Bienvenido a La Voz, estarás a partir de hoy en la sección de Deportes.


En ese momento me sentí el tipo más afortunado del globo, con 18 años y trabajando para deportes en un diario de tirada provincial. No estaba mal para empezar. Es más, os puedo decir que la reunión fue a las 10:30 h. de la mañana, y el saber que me quedaban allí 6 horas muertas no me importó nada de nada.


Así comenzó mi vida “profesional”, porque hay que recordar que aún a día de hoy sigo siendo estudiante. Otro día más de cómo se ha ido uno moviendo poquito a poco por estos mundos….

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Hay hombres que luchan un día y son buenos. Hay otros que luchan un año y son mejores. Hay quienes luchan muchos años, y son muy buenos. Pero hay quienes luchan toda la vida, ésos son los imprescindibles.

Bertold Brecht